martes, 13 de septiembre de 2011

VACIONES EXÓTICAS


Miguel caminaba cabizbajo, mientras chutaba una cajetilla de tabaco vacía, arrojada en el suelo, pensando cómo pasaría, otro año más sus malditas vacaciones. El trabajo había escaseado, por fin tenía más días libres y menos dinero para poder disfrutarlos. Suele pasar, nunca se tiene todo a la vez.

-Otro año más en casa, aburrido, con este calor infernal y sin amigos, la mayoría trabajan en agosto y los que no se han marchado con sus familias.-

Sigue lamentándose de su mala suerte, hasta que levanta la cabeza y al fondo ve la salvación de su tedio estival: ¡VACACIONES PARADISÍACAS! TUS ACTIVOS MERECEN UN DESCANSO. EN AGOSTO SEGUIRÁN AUMENTANDO, LA ISLA DE MAN TE LO GARANTIZA. Un inmenso mar azul rodeado de arena y palmeras, bajo un cielo soleado casi celestial, invitaba a coger las maletas y plantarse en una isla totalmente desconocida, llena de confort, belleza y abundancia. Las olas de la valla publicitaria formaban el símbolo del dólar. Miguel se sumergió por unos minutos en sus sueños y se vio en una tumbona, bebiendo una caipiriña, rodeado de bellas sirenas a la sombra de un cocotero, recibiendo dinero por cada hora disfrutada, en vez de tener que pagar por ello. Esas si serían unas vacaciones de escándalo, con todo el lujo a coste cero.
Pasaría unos días de ensueño y volvería a casa con su cuenta bancaria a rebosar. ¿Quién no pagaría por alojar a un hombre como él? Su mera compañía bien lo merecía.

De repente alguien le empuja, algo despistado vuelve a la cruda realidad, su autobús ha llegado, y la gente se agolpa intentando formar una cola ordenada. Consigue subir a tiempo y una vez sentado contempla de nuevo aquel paraíso, suspirando por ello. En eso, su compañero de viaje le dice:

-¿Te gustaría vivir ahí, verdad? ¿Y a quién no?-
- Ya lo creo, ¿imaginas pasar unas vacaciones así?-
- Este destino no es para nosotros, los que van allí pasan unos días siembran su cosecha, que más tarde recogerán, sin mover ni un dedo.-
- No me digas ¿también te ofrecen una parcela para cultivar y su mantenimiento? Estos ingleses son la caña, ya no saben qué hacer para robarnos el turismo.-
- Jajajjajaaa, bueno, creo que por mucho que inventen nada supera nuestra tortilla de patata, un buen jamón o una sangría bien fresquita.-
- España is different.-
- Ya lo creo, es usted un guasón, ¿eh?-

El trayecto ha terminado, Miguel se baja en la siguiente parada, y muy educadamente se despide de su amable vecino viajero. Quién sigue riendo, recordando sus palabras.
-Isla de Man, tengo que buscarla en el google, este verano no se me escapa, mira que si la cosecha me va bien y me quedo a pasar un año... Preparaos manes Miguel está a punto de arrasar, jajjajaaa.–

Al día siguiente emocionado llega al trabajo y en el almuerzo se acerca a la secretaria y le sugiere compartir estas vacaciones, a lo que ella sonríe tomándose a guasa tal invitación. Miguel comenta todos sus planes y lo que había visto en aquella valla publicitaria. La secretaria desconocía aquel destino, y más por curiosidad e intriga, que por interés de aceptar su proposición, aprovecha un hueco en su jornada para colocar en la casilla del google: ISLA DE MAN, y cliquear en buscar.

Isabel con los ojos como platos lee: La isla de Man situada entre Irlanda y Gran Bretaña representa uno de los paraísos fiscales más importantes de los últimos tiempos. Condiciones especiales, tipos impositivos bajísimos, y totales facilidades a las empresas ubicadas, hace de este entorno frío y lluvioso un paraíso para cosechar grandes dividendos a coste cero. ¡Saque a pasear sus ahorros y consiga en unos meses, lo que obtendría en años!...

NIEVES JUAN GALIPIENSO.
13/9/11.